Todavía una canción de amor (IV)

Camino de Madrid – Pedro Javier Hermosilla

Y llegaste tú y llenaste de luz las rejas viejas de la baranda de mi balcón, que hacía tiempo que no iluminaba mi habitación.

Descubriéndote – Rosana

Eres tan frágil como la luz, abres mi amanecer. Si no me alumbras yo, no me acabo de encender y soy un corazón que se derriba y late cada vez con menos vida

Me equivocaría otra vez – Fito & Fitipaldis

Soñaré solo porque me he quedado dormido. No voy a despertarme porque salga el sol; ya sé llorar una vez por cada vez que río, no sé restar... no se restar tu mitad a mi corazón.

Ella es y será todo para mi – Revolver

Ella es y será todo para mi por hacerme comprender que es el amor, amor de piel para adentro del que parte en dos huesos

Quizás sea el mar – Dani Flaco

El salitre vestía tu piel, Yo, desnudo en la arena, atraqué mi barco de papel, lo amarré a tu melena. Y una estrella aprendiz de fugaz y voyeur de sirenas, se fugó hasta la orilla, a aprender el verbo acariciar. Y una perla que huyó de una ostra te puso un pendiente, te supo adornar, y alegó que quería estar presente, cerca de tu oído, y oírme susurrar

A medio pulmón - Carlos Chaouen

Si vuelvo a nacer, te busco sin duda detrás de la luna, del amanecer dónde te desnudas, donde tengo las de perder.

Te amaré – Miguel Bosé

Por ponerte algún ejemplo te diré que aunque tengas manos frías te amaré, con tu mala ortografía y tu no saber perder con defectos y manías te amaré.

Camino de Madrid – Pedro Javier Hermosilla

La lagrima que te sale la guardaría, para que no tuvieras penas y usaras siempre la misma. Te quiero abrazar de noche por si, de día, no puedes estar conmigo...con tu olor me conformaría

A la orilla de la chimenea -- Joaquín sabina

Puedo ponerme cursi y decir que tus labios me saben igual que los labios que beso en mis sueños, puedo ponerme triste y decir que me basta con ser tu enemigo, tu todo,
tu esclavo, tu fiebre, tu dueño. y si quieres también puedo ser tu estación y tu tren, tu mal y tu bien, tu pan y tu vino, tu pecado, tu dios, tu asesino... o tal vez esa sombra que se tumba a tu lado en la alfombra a la orilla de la chimenea a esperar que suba la marea.

Vuélvete la luna – Shaila Durcal

A pesar de todo lo que estoy pasando a diario y a pesar de lo que nunca te pude decir yo te doy las gracias por todo lo que vivimos, este amor tan grande se quedo conmigo

Ahora ya ves - Olga Román

he dejado de perderme en los bares, de buscarte en la noche, de rendirme al amanecer, he dejado de pensar si algún día tal vez si tu quisieras, tal vez volveríamos a ser lo que fuimos, lo que un día quisimos, lo que nunca tuvimos

Me estas atrapando otra vez -- Los Rodríguez

Y aunque alguien me advirtió, nunca dije que no, y ahora tengo que esconder las heridas. Y ese pulso que jugué, porque quise lo perdí...

Me equivocaría otra vez – Fito & Fitipaldis

Se torció el camino, tú ya sabes que no puedo volver. Son cosas del destino, siempre me quiere morder. El horizonte se confunde con un negro telón y puede ser... como decir que se acabó la función.

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Prueba de auto superación personal

¿Sabes tocar el piano?
-“Bueno, solo unas notas de una canción” me responde Nerea....
¿Porque no te acercas al piano, te sientas y tocas esas notas? – le exhorto a Nerea.
Ella me mira incrédula...
¡Tómatelo como una prueba de autosuperación personal! digo.

Puente de Diciembre, Valencia, tres compañeros de la oficina, Nerea y yo. Tras un largo día callejeando la ciudad del Turia, cenamos en un restaurante cercano al hotel y estábamos tomando una copa antes de retirarnos a descansar en el piano bar del hotel. Hablábamos sobre música, sobre instrumentos musicales, sobre el piano... y entonces se me ocurrió decirle eso.

Sabía que no lo iba a hacer de ninguna manera. Nerea tiene mucha iniciativa, un fuego dentro que no deja de brillar, pero muchas veces necesita un empujoncito para seguir adelante. Y, aun a sabiendas de que no lo iba a hacer, se me ocurrió intentar espolearla y decirle que era una prueba de autosuperación personal.

Me miro y dijo: ¿una prueba de autosuperación personal? Y tu porque no ......” y entonces el silencio. Se callo y no menciono nada mas sobre el asunto.

No dijo nada mas. Pero así y todo, por su arranque, por su entonación... porque a veces las cosas no hace falta decirlas, creo que podría adivinar cuales fueron las palabras que no se atrevieron a salir de sus labios. Podría equivocarme, evidentemente, pero creo que quería decir : ¿Y tu porque no intentas como prueba de autosuperación personal superar que yo no sienta nada por ti, ser solo amigos, y no marcharte a Boise?”

Me puedo equivocar, pero esto es lo que leí en su gesto, en su arranque, en su mirada. Sin embargo, hay algo en lo que no me equivocaría y eso es en la respuesta.

Es cierto que no he superado aun que no me quiera. Y la verdad, no se si lo haré alguna vez en mi vida. Pensar que nunca mas voy a conocer otra persona con la que me llegue a sentir como me he sentido con ella es una losa demasiado dura de llevar... para mi y para las personas que puedan querer compartir su futuro conmigo. Pensar que todo lo que queda por vivir no son mas que visiones translúcidas de la felicidad que he tenido a su lado es bastante jodido. Saber que para la persona que es capaz de sacar de ti tu mejor versión de ti mismo no eres suficiente, no cumples las expectativas, es todavía peor.

Pero, así y todo, me supero a mi mismo todos los días. A pesar de verme abrumado por esta puta realidad cada despertar, me levanto, me ducho y salgo a la calle cuando lo único que me apetece es perderme entre las sabanas y dejar que pase la mañana.

Y me superé cuando renuncie a coger una baja laboral cuando mi medico de cabecera me la ofreció.... y me sigo superando cada vez que acudo a algún lado aunque no tenga ganas de ir, a una cena con los amigos, a una fiesta.... y sonrío y miento cuando alguien me dice que me ve triste, que a ver que me pasa, que estoy apático, que a ver porque no hablo.... Y me sigo superando aunque a mi puzzle le falten demasiadas piezas para continuar.

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Recordar

Encontré esta poesía en la cajita de Patricia FM. Me gustó y ella aceptó gustosamente a dejar que me la trajera a la buhardilla. Así que aquí os la dejo, aun click de distancia.

No tengo muy claro porque me gusta. Supongo que recoge fielmente mis sentimientos en estos momentos. Aunque tampoco tengo muy claro si en mi situación debería seguir leyendo poesías o preocuparme por mis sentimientos. Tal vez debería aspirar a borrar toda esa parte de mi, dejar de leer libros de caballerías como en el Quijote...

Supongo que seria todo más sencillo... convertirme en un bruto, leer periódicos deportivos o revistas de coches, decir comentarios machistas y hacer desaparecer cualquier cosa parecida a la sensibilidad.... desahuciar el amor....

Aunque me imagino que no, que estas palabras serán fruto del delirio de la noche, del frío que hace por aquí adentro y por allá afuera, a un día mas sin Nerea, a un paso mas a oscuras sin saber a donde, a un par de lagrimas mas en la almohada...

Llegaste y te fuiste como una ola que se rompe en el mar
y hoy me repito una y otra vez no tengo nada que esperar
y aun así marco los días en el calendario y pienso mañana vendrá
y me quedo sentada viendo como termina otro día y repito
no hay nadie a quien esperar.

Ha pasado mucho, tal vez los dos no tenemos nada de que hablar
me quedare mirándote, tal vez tratando de volverme a enamorar
y en ese intento oiré un eco que dirá que no puedo volverme a enamorar
porque nadie recuerda algo que no ha podido olvidar.

He imaginado muchas escenas y solo dos palabras que escucharas
tal vez me hago daño, pero no he podido ser de nadie mas
y sigo buscando en la noche, viendo esos lugares de allá
llorando por la brisa, llorando tal vez por algo mas.

Es irónico pero todo me recuerda a ti
el estreno de una película, un concierto para compartir
el titulo de un libro, aquellas cosas que aprendí de ti
algún día hablaremos, es gracioso, ya lo veo venir.

Seguiré escuchando esa canción y esa frase que alguna vez te oí decir
cuando sienta mi corazón acelerado mirare alrededor, tal vez estarás por ahí
cuando llore sin ninguna razón entenderé que necesito verte otra vez
y espero que algún día recordando toda tu vida puedas ver cuanto te ame.

Patricia Ferrer Mavarez

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Las cosas que no te dije

-“Bueno, adiós...” me dice Nerea mientras pasa por detrás mío y me toca levemente en las espalda a modo de saludo y despedida al mismo tiempo...
-“Adiós” le respondo.
Se detiene allí y se da la vuelta, equidistante entre mi compañero y yo. Los tres y dos personas mas acabamos de pasar el puente de Diciembre en Valencia.
-“Habrás dormido bien no?”
-“Bueno, me he levantado a las 8 y media”, le respondo.
- “Yo voy ahora a casa y a la cama”...dice mientras me mira sonriendo. El viaje de vuelta en coche fue largo. Llegamos al aeropuerto donde devolvimos el coche de alquiler a las 11 y media mas o menos. A eso súmale que del aeropuerto a su casa tiene una hora en coche y que ella trabajaba el lunes por la mañana. Estaba cansada.
- “Ese jersey es nuevo...“ digo. No se si realmente es una pregunta o una afirmación pero me había fijado en su jersey desde que llegué a trabajar. De hecho, es lo primero que hago todos los días al llegar a la oficina, otear el horizonte en su búsqueda.
-“Bueno, lo compre en Septiembre mas o menos pero no lo pongo mucho”, responde
-“Es bonito”
-“Gracias....” responde mientras se aleja.
En verdad el jersey era muy bonito. Gris y negro a rayas y tenia un cuello doblado amplio.

Y le dije que era bonito mientras la miraba y se me moría el alma por no poder decir todo lo que hubiese dicho. No era solo que el jersey era bonito, estaba bellísima con el pelo recogido en una coleta... y no le dije nada mas, pero me habría encantado decirla que sea atrevida, al menos en las pequeñas cosas... porque de su atrevimiento saldrá multiplicado un fruto exponencial......

Nerea, te diría que sonrías siempre, que de tus sonrisas salen arco irises que iluminan todo a tu alrededor, que los colores oscuros están bien, pero que cuando te vistes de rojo, o de amarillo, o de verde, o de azul, la luna se enfada porque rivalizas en belleza con ella y las estrellas tiritan de envidia.

También que camines con paso firme y decidido por la vida, y que aunque a veces dudes de ti misma, debes de saber que tienes un potencial inmenso dentro de ti y que eres capaz de hacer todo lo que te propongas. Cree siempre en ti, Nerea, cree en ti, porque si lo haces, nada te podrá parar y seras capaz de sorberle todo su jugo a la vida.

En fin, hay tantas cosas que se me quedaron en el tintero, tantas cosas que nunca te dije...y que ya nunca te podré decir... excepto que tienes un jersey muy bonito.

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A 8300 kilómetros, todavía en casa

Espacio, mucho espacio, fútbol americano, jet lag, aeropuertos, aviones, más aeropuertos y más aviones, montañas, poker, casinos, fichas, hamburguesas, caesar salads, vascos, americanos, vasco-americanos, interminables carreteras, sueños, esperanzas, aguas termales, amigos, moxie java cafes y muchas cosas mas... pero sobre todo un faro.... y a 8300 kilómetros de Nerea.

¿Habéis pensado alguna vez en la importancia de los faros? Siempre nos los retratan junto a un acantilado, solos, melancólicos pero pararos durante un solo momento a pensar en la cantidad de barcos que se habrían chocado contra esos acantilados de no ser por esa luz que desprenden al anochecer, esa mano amiga en el temporal....

En la vida real, uno se puede considerar mas afortunado a medida que va encontrando esa luz de los faros tras los diferentes pasos que da. Así que me gustaría dar gracias a todos aquellos que dejaron encendida la luz de sus faros para que yo la viera y no me chocara, a todos los que pasasteis por aquí y encendisteis una vela, sobre todo este último 2007....

Volví de mis vacaciones en Boise y como bien sabéis, en unas semanas espero estar de vuelta allí. Entre tantas cosas, encontré un faro que me iluminará el camino en el futuro... No es que aquí no tenga esa luz, es solo que los acantilados están demasiado cerca y necesito alejarme un tiempo de ellos, aprender a navegar otra vez, disfrutar con el viento en la cara y el olor a salitre.

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